La gran importancia de los "breaks" del trabajo.
Como ya sabrás, hay planes muy buenos para conseguir despejar la mente del trabajo. Pasear, conversar con un compañero y tomar un café son los más obvios, y son fabulosos, por supuesto. Pero si no puedes alejarte de tu escritorio, las posibilidades de evadirte de tu labor son mucho más limitadas.
Una gran opción para un descanso mental es cambiar tu atención a un vídeo relajante o divertido en la pantalla del ordenador. Es un entretenimiento muy simple y eficaz, ya que solo tienes que buscar un vídeo y darle al play.
Otra gran idea es intentar soltar tu creatividad. Si tu trabajo es muy rutinario, puedes coger un lapiz y un papel y dedicar 15 minutos a intentar escribir una historia o realizar un pequeño dibujo. Potenciar la creatividad en el trabajo de esta forma ayuda a que alejes la mirada del ordenador durante un tiempo y reactiva tu forma de percibir el trabajo, dándote un respiro de tus actividades.
Por último, el que puede ser a la vez más difícil y relajante, la meditación. Esta técnica se lleva utilizando desde la antigüedad para conseguir la relajación total de mente y cuerpo. Es algo que requiere constancia para que resulte efectiva a largo plazo, pero todas las personas que la practican sienten beneficios inmediatos en pocos minutos.
Así que la próxima vez que quieras tomarte un descanso, hazlo y no te sientas culpable. Estás participando en un hábito saludable que puede hacer que tu productividad en el trabajo aumente.
Buscar cuantos minutos son necesarios para desconectar.