Cinco errores que debes evitar a la hora de emprender
La senda del emprendimiento es dura y está llena de riesgos. Ponerse al frente de un proyecto propio no es tarea sencilla, pues además del trabajo propio de nuestro sector deberemos afrontar múltiples tareas periféricas que son imprescindibles para cualquier empresa o autónomo. Al tratarse de temas que no están relacionados directamente con nuestra labor, podemos pasarlas un poco por alto o no prestarles la atención que merecen, lo que nos puede conducir a graves errores que en el ámbito empresarial se traducen en pérdidas monetarias.
Para evitar que tales desaciertos lastren nuestro incipiente negocio y optimicemos al máximo los recursos que poseemos, tan valiosos al principio, Startup Academy ha realizado un estudio que revela los cinco errores más comunes entre los emprendedores y las empresas jóvenes durante su primer año de actividad. Más allá de la mera enumeración, la escuela de profesionales digitales también ha hecho una estimación aproximada de las pérdidas en euros que pueden suponer estos fallos a través del estudio de gastos y ganancias de diferentes freelancers y pymes.
1. Obviar los errores de empresas del sector
Conocer el sector en el que nos movemos es fundamental. Otros antes que nosotros han recorrido nuestro camino, quizás no en los mismos términos pero de forma parecida. Por eso es importante que estudies los casos de éxito y los errores que han cometido otros profesionales y empresas, con el objetivo de que aprendas de ellos y no caigas en fallos que ya han cometido otros.
Aprovecha la experiencia de los demás a través de conferencias, ferias, encuentros de negocios y portales de internet. De esta forma, al conocer dónde erraron otros, ahorrarás tiempo y recursos al evitar esos baches en el camino. Según Startup Academy, estudiar la trayectoria de empresas y profesionales de tu sector y aprender de sus fallos puede ahorrarte hasta 50.000 euros.
2. Empezar la casa por el tejado
Todo negocio adolece de cierta fragilidad en sus inicios, por lo que lo primero que debes hacer es asentarlo sobre una base sólida. Esto quiere decir que debes plantearte objetivos claros y asequibles que vayas cumpliendo poco a poco, sin perderlos nunca de vista. En este sentido, es muy importante que tengas muy claro cuánto puedes invertir y el mercado que quieres abarcar.
No obstante, lo más importante al principio es que identifiques y definas con exactitud el Producto Mínimo Viable (MVP, siglas en inglés de Minimum Viable Product), que es el artículo o servicio que quieres proporcionar con las características mínimas para que el cliente lo quiera comprar. Es decir, que satisfaga sus necesidades sin que tenga todas las propiedades de las que lo quieres dotar, con el objetivo de empezar cuanto antes a ofrecerlo e ir evaluando si funciona o hay que hacer modificaciones. De esta forma irás asentando los pilares de tu futuro negocio. Este error puede suponer hasta 20.000 euros de pérdidas.
3. No dar importancia a la comunicación
Si no te conocen, no existes. Buena parte del éxito de un negocio es saber hacer llegar a sus potenciales clientes su cartera de productos o servicios y que, además, tengan la necesidad de adquirirlos. Por ello, una buena comunicación es fundamental no sólo para informar, sino también para seducir y hacerles partícipes del modelo de la empresa. Necesitarás un plan de comunicación que dote a tu negocio de unos valores con los que el cliente se identifique y hacia los que se sienta naturalmente inclinado a participar. Se trata de un aspecto tan importante que el coste de obviarlo es incalculable.
4. Olvidar la difusión de tu información
Si importante es planear una buena comunicación, tanto o más lo es acertar en los canales distribución. Para ello debes elaborar un buen plan de marketing, en el que identifiques los soportes de distribución que mejor funcionarán para llegar a tu público objetivo. Es fundamental que evalúes tu mercado, las características de tus compradores, el mensaje que quieres transmitir y el presupuesto del que dispones para ello.
Además de esto, es importante que, independientemente del canal que elijas, existan herramientas de métrica que te ayuden a evaluar el impacto de la campaña de marketing, para saber si funciona en los términos en la que la has planteado o si necesitas cambiarla. Un error mercadotécnico puede suponer un perjuicio en tus cuentas de hasta 20.000 euros.
5. Dejar la formación a un lado
El conocimiento es poder. Y en el contexto actual, en el que el mercado avanza a un ritmo trepidante, es necesario que renueves esos conocimientos constantemente, pues pueden cambiar de un día para otro. Para ello es fundamental que te mantengas informado a través de portales especializados en tu sector, que sigas las noticias políticas y económicas de medios generalistas y que, llegado el caso, realices algunos cursos para adquirir competencias que no tienes y te pueden ser necesarias.
No mantenerse informado de las últimas novedades de tu sector puede hacer que tus productos o servicios queden obsoletos, lo que inevitablemente hará que pierdas clientes. El coste que la desinformación y la falta de formación pueden tener para tu negocio es incalculable.
